La corteza somatosensorial en los lóbulos parietales es crucial para interpretar datos sensoriales como el tacto, la temperatura y la propiocepción (conciencia de la posición corporal). Esta región cerebral especializada presenta una estructura organizada en la que las neuronas de la parte superior procesan principalmente sensaciones que se originan en la parte inferior del cuerpo, mientras que las de la parte inferior manejan las entradas de la parte superior. Esta organización facilita la localización precisa de los estímulos sensoriales, lo que garantiza respuestas físicas precisas a las interacciones ambientales. Por ejemplo, cuando uno se toca el pie, se activan las neuronas ubicadas en el segmento superior de la corteza somatosensorial. Por el contrario, la estimulación de la cara activa las neuronas ubicadas más abajo en esta corteza, lo que ilustra el mapeo sistemático del cerebro de las entradas sensoriales.
La corteza motora está adyacente a la corteza somatosensorial, dentro de los lóbulos frontales. La corteza motora es otro componente crucial del sistema nervioso. Es responsable de controlar el movimiento enviando señales a los músculos voluntarios en todo el cuerpo. Estas señales, transmitidas a través del sistema nervioso periférico, permiten acciones físicas coordinadas. Por ejemplo, el simple acto de mover una mano implica que la corteza motora envíe instrucciones precisas para activar los músculos del brazo necesarios, lo que permite el movimiento deseado.
La corteza cerebral alberga la corteza de asociación, que integra la información sensorial y motora con los recuerdos y el conocimiento existente. Esta integración es vital para ejecutar funciones intelectuales superiores, como el análisis, la planificación y la toma de decisiones. La corteza de asociación permite procesos cognitivos complejos al conectar las experiencias sensoriales con los datos de la memoria relevante. Un ejemplo cotidiano de esta capacidad es el reconocimiento de una cara familiar y el posterior recuerdo del nombre de la persona, vinculando los datos sensoriales visuales con los recuerdos almacenados para recuperar la información adecuada. Esta intrincada interacción entre diferentes áreas corticales subraya la sofisticada arquitectura del cerebro y su capacidad para realizar tareas complejas, desde el procesamiento sensorial básico hasta las funciones cognitivas avanzadas.
Del capítulo 2:
Now Playing
Biopsychology
415 Vistas
Biopsychology
3.2K Vistas
Biopsychology
1.6K Vistas
Biopsychology
1.1K Vistas
Biopsychology
789 Vistas
Biopsychology
813 Vistas
Biopsychology
723 Vistas
Biopsychology
300 Vistas
Biopsychology
560 Vistas
Biopsychology
413 Vistas
Biopsychology
310 Vistas
Biopsychology
535 Vistas
Biopsychology
1.8K Vistas
Biopsychology
260 Vistas
Biopsychology
329 Vistas
See More
ACERCA DE JoVE
Copyright © 2025 MyJoVE Corporation. Todos los derechos reservados